Valladolid Yucatán
Valladolid es uno de los pueblos mágicos de Yucatán, un lugar con riqueza natural histórica, sociocultural, gastronómica. Además de la presencia de tradiciones y costumbres vivas.
Algo que destaca de Valladolid es la exquisita gastronomía, que incluye longaniza asada, Los Lomitos, Escabeche Oriental y la auténtica cochinita pibil.
La ciudad de Valladolid ha sido nombrada Pueblo Mágico por la belleza que resguarda en su interior y alrededores, entre atractivos naturales, arquitectónicos, gastronómicos y religiosos; un día no basta para recorrerlo en su totalidad y visitar cada sitio.
1. Iglesia de San Servasio
Esta iglesia se encuentra justo en frente de la plaza principal de Valladolid, en el centro de la ciudad, reconstruida en el año 1703.
Después de ser profanada durante “el crimen de los alcaldes” en el que éstos fueron destituidos por el pueblo y se refugiaron en la iglesia.
Donde fueron asesinados, fue el mismo Obispo quien mandó derribarla para borrar tal mancha.
2. Deliciosa Gastronomía
De los platillos más famosos en Valladolid se encuentran los lomitos, hechos de carne tierna de cerdo, bañados en salsa de tomate rojo, servidos en un tazón, acompañados de tortillas hechas a mano.
No dude en comprar chorizo para acompañar sus comidas en casa., se trata de un embutido condimentado con achiote y otras especias, atado con fibras de henequén, aunque se produce en otras ciudades su origen fue aquí en Valladolid.
3. Admira el paisaje urbano
El paisaje urbano de Valladolid está tapizado por casonas centenarias de techos altos y ventanales abiertos de par en par.
A través de ellos se aprecian postales de la vida en la tranquilidad de las ciudades yucatecas: alguna mujer bordando junto a la luz de la ventana o alguien tomando la siesta del mediodía en una hamaca.
Las fachadas pintadas de amarillo, rojo, azul y verde se bañan de sol al caer la tarde y parecen volverse más brillantes; tanto que hasta da un poco de envidia no vivir en los barrios vallisoletanos.
Los sitios más pintorescos para una caminata son los barrios de La Candelaria, Santa Ana, San Juan y Sisal.
Durante la noche Valladolid adquiere un encanto bohemio. Para disfrutar esa atmósfera hay que caminar por la Calzada de los Frailes, uno de los paseos nocturnos más románticos y agradables de la ciudad. Este paseo empieza en el centro y desemboca en el Convento de San Bernardino, el segundo convento más grande de Yucatán, construido por los franciscanos en el siglo XVI.